#265 – Cómo enfocarte en lo correcto en el momento ideal

¿Eres de los que espera el momento perfecto para comenzar un proyecto?

Si ese es el caso, tengo que decirte que ese momento nunca llega.

Durante años nos hemos mentalizado que debemos encontrar el lugar y tiempo concreto para comenzar a trabajar en la meta que hemos deseado cumplir.

Una de ellas, principalmente, es escribir un libro.

Vivimos todo el tiempo esperando ese momento, pero nunca llega.

Esto pasa porque no hay una preparación para lograr el objetivo.

Una meta requiere de un plan específico con pasos detallados que tienen que concretarse en un tiempo determinado para ser lograda o alcanzable.

El problema es que muchas veces subestimamos lo que podemos lograr en el largo plazo y terminamos no haciendo absolutamente nada.

Se nos hace muy difícil cuando pensamos en la meta que queremos concretar.

Siendo más específico con los libros, algunas de las excusas que nos vendemos son:

  • Me va a llevar mucho tiempo escribir el libro.
  • No sé cómo empezar.
  • Hago demasiadas cosas en mi vida diaria que dudo mucho tener el tiempo para lograrlo.
  • No me puedo concentrar porque mis hijos, familia o entorno son demasiado absorbentes.

Yo entiendo que tal vez sientas un poco de frustración si leíste las excusas y te sentiste identificado.

Casi nunca nos entrenan para lograr metas, sino que vamos haciendo las cosas sobre la marcha, es decir, mientras vivimos nuestras vidas.

Lo único para lo que quizá nos hemos preparado es para un examen o hacer una presentación.

Hace unos años, cuando yo pensaba en las metas, ni siquiera me planteaba las metas quería lograr en la vida.

Hablaba sobre temas o cosas que tal vez eran mis intereses, pero solo trataba de llenar expectativas.

Yo pesaba más de 107 kilogramos y siempre había querido perder peso porque quería verme bien, pero no tenía la remota idea de cómo hacerlo o que era lo que tenía que cambiar.

Si hubiera sabido que lo único que necesitaba era un cambio de mentalidad y de estilo de vida, tal vez sería una persona saludable desde que estudiaba la preparatoria.

Sin embargo, esas informaciones no estaban a mi alcance y no tenía ni la mentalidad, compromiso ni disposición para hacerlo.

Estaba sumergido viviendo mi vida en automático, trabajando para los sueños de otros y cumpliendo las expectativas de las personas de mi entorno.

No digo que sea tu caso, pero mi jalón de orejas fue cuando enfermé de la vesícula y tuvieron que realizarme una cirugía.

Tuve una nueva oportunidad de construir una vida diferente y fue lo que hice, pero no necesitas que sucedan este tipo de cosas para que el momento ideal llegue.

El momento ideal siempre está a tu alcance, solo necesitas formalizar el compromiso contigo mismo y aceptar que hay un problema que debes solucionar.

Para enfocarte en el momento ideal solo necesitas seguir un plan de acción que te ayude a concretar tu objetivo, con pasos alcanzables y medibles.

Por ejemplo, en la escritura, yo mido mis avances mediante palabras escritas. Elijo una meta total en palabras y ese número lo voy alcanzando conforme escribo todos los días. Esta técnica es mucho más efectiva que completar páginas.

En el caso de la pérdida de peso, es mejor medir tus tallas que los kilos bajados. ¿Por qué? Porque puede que hayas ganado más músculo, tomaste agua o comiste antes de pesarte y eso afecta en tu peso.

Recuerda, el momento perfecto nunca llega. Tu tienes que crearlo y la decisión depende totalmente de ti.