#347 – Qué hacer cuando sientes que todo lo que trabajas no funciona

Hace unos años decidí emprender con mis libros.

No tenía claro cual era mi siguiente paso, pero sabía en el fondo que era la decisión más correcta.

Cuando publiqué el primer libro, en agosto de 2014, no tenía idea de lo que eran:

  • Embudos de ventas
  • Landing pages
  • Páginas de gracias
  • Autorespondedor

Estos cuatro elementos que hoy en día son parte de mi emprendimiento como autor.

Aunque el camino puede que hoy sea más claro y que mis resultados hayan y sigan mejorando, no siempre fue así.

Tuve mis propias dudas al principio, ya que tenía muchos paradigmas sobre la escritura, sin olvidar los emprendimientos fallidos que tuve en Monterrey.

Para vencer estos paradigmas tuve que investigar mucho, pero lo más importante, tuve que aplicar lo aprendido. Algunas veces mis resultados fueron alentadores, pero no lo suficientemente buenos como para presumirlos, al menos eso pensaba yo.

Estaba acostumbrado a la satisfacción a corto plazo, que lo único que quería era ver resultados inmediatos y cuando esto no sucedía, caía en un vaivén de emociones.

Sentía que todo lo que hacía no daba resultados y quería que la tierra me comiera.

Me frutraba, pataleaba, lloraba y quería tirar la toalla porque no lograba lo que me proponía.

Estaba muy decepcionado conmigo mismo, porque lo había dejado todo para emprender.

Un día le comenté a mi madre:

Si hubiera sabido todo lo que iba a pasar cuando emprendí con mis libros y cursos, siendo empleado, creo que nunca me hubiera atrevido a hacerlo.

Este comentario fue hecho desde la escasez, puesto que estaba muy frustrado durante esos días.

La frustración es parte de un proceso grande de aprendizajes y tienes que buscar cómo darle la vuelta.

Habrá días muy buenos, otros serán mejores, pero también habrá días que serán malos o de aprendizajes.

Puedes no tener ventas y estar haciendo mucho, pero creo que lo más conveniente es hacer un alto y dejar que tus emociones fluyan.

Un aprendizaje que he tenido en los últimos años es no contradecir a una emoción. Déjala que fluya, que exista y que salga por sí sola.

Hace un rato me sentía muy mal conmigo mismo. La había pasado mal por un malestar estomacal y sentía que había desperdiciado demasiado tiempo. Llevaba dos días despertando durante la madrugada y sin dormir lo suficiente.

No había grabado mi Podcast, tampoco había escrito para el blog y mucho menos había realizado las otras actividades de marketing para mis libros.

Por un momento sentí que, cuando todo estaba yendo bien, siempre habría un momento en que algún malestar o imprevisto afectaría a mi rutina.

Entonces me dije para mis adentros: esto que estoy sintiendo es temporal, déjalo que exista.

Mientras escribo esto me siento mucho mejor. El auto-flagelamiento se ha disipado y he escrito 3 artículos en menos de dos horas.

Cuando empieces a sentir que todo lo que haces no funciona, porque no ves resultados en tu emprendimiento, haz un alto y repite en voz alta:

Esto que estoy sintiendo es temporal.

Haz meditación o toma un descanso y después vuelve al trabajo. Revisa lo que ha funcionado y lo que no y haz un plan de acción para mejorar lo que no te ha dado resultados.

Hay una frase que leí reciéntemente en el libro de Mel Robbins llamado «The High Five Habit» que dice:

«Estoy bien, estoy a salvo y soy amado».

Me ha gustado mucho porque, cuando te dices estas frases a ti mismo, de una forma u otra, lo que sientes, comienza a desaparecer lentamente.

En mi caso, trato de repetirlo muchas veces porque soy muy cabeza dura. Hay veces en las que no entiendo a la primera, por lo que tengo que ser más repetitivo.

Hace poco tuve una conversación con un amigo en las que abordamos el tema de la repetición.

Le dije: es que a veces tienes que ser repetitivo, incluso contigo mismo.

Es la base para la construcción de los buenos hábitos, donde la repetición se traduce en la constancia de realizar una acción específica.

¿Puedes ver lo poderoso de esto?

Muchas veces las frustraciones son parte de un estado mental en el que nosotros mismos nos condicionamos, así que, depende de nosotros quedarnos ahí o salir de ellas.

Recuerda que hay resultados que llevan tiempo, así que trata de que la paciencia esté más presente en tu vida diaria.

Cuéntame en los comentarios si estos consejos te fueron útiles y si te gustó este post, pasa la voz y compártelo con alguien que necesite leerlo e inspirarse.