La idea de escribir una historia de suspenso siempre me parecía un poco atrevida.
Porque en un principio no me consideraba escritor, y además, era algo que nunca había hecho.
Pero sabía que quería hacerlo y lo primero que hice fue pensar en las historias que más me hacían quedarme en suspenso y determinar cómo podía aplicar eso a mis propias historias.
En el caso de Secretos del Pasado, una de las cosas que más me emocionaba era la incursión de personajes misteriosos.
Porque al principio de la historia no sabíamos nada sobre ellos, pero a medida que íbamos descubriendo cosas, el suspenso aumentaba.
Yo quería darle un aire oscuro a la historia, pero que a la vez también quería que tuviera en suspenso a los lectores.
Que convenciera al lector de seguir la historia y que quedara demasiado intrigado por conocer lo que había pasado.
En esta novela se abordan las apariciones de fantasmas y la primera es una niña que se le aparece a Sophie Barnes para guiarla a un destino inesperado.
En un principio me daba un poco de miedo, pero cuando te concentras en simplemente contar la historia, esa emoción se disipa.
Este curioso personaje se llama Andrea y, supuestamente, murió en un incendio años atrás en la ciudad de Sacret Fire, que también es conocida como la ciudad fantasma por las leyendas urbanas sobre las apariciones.
Estas apariciones son explicadas en un libro que publiqué en 2018 titulado «El Remanente», pero la aparición que inquietó a muchos de mis lectores es la de la niña Andrea.
Y, SPOILER ALERT, esta aparición no tiene nada que ver con las que se revelan en El Remanente.
Nadie sabe mucho sobre esta niña, incluso, cuando termina Secretos del Pasado, nos deja con muchas dudas.
Pero ese siempre fue mi objetivo: dejar al lector intrigado para que leyera la continuación.
Escribir este personaje fue una de mis primeras incursiones en el suspenso como escritor.
Porque antes de todo esto yo solo me enfocaba en escribir historias e ideas, pero no fue hasta que me tomé demasiado en serio la idea de escribir un libro, que decidí meterme de lleno a redactar novelas de suspenso.
La niña Andrea le daba ese toque. Su personaje era de los principales suspensos en toda la historia y forma parte de uno de los más grandes misterios en toda la serie.
De hecho decidí incluir a otro personaje, una chica llamada Sage Walker, que es una Blogger de lo paranormal y que ha documentado las apariciones de esta pequeña niña.
Hoy en día, Sage Walker tiene su propia serie junto a otros personajes en «Los Misterios de Sacret Fire», donde forman el equipo de los Guardianes de la Historia.
Pero bueno, esa es otra historia.
Si de verdad quieres mantener en suspenso a tus lectores para que vayan descubriendo las cosas por si mismos, debes pensar en las historias de misterio que más te gustan.
Algo que puedes hacer es soltar pequeñas revelaciones a lo largo de los capítulos y dejar el principal descubrimiento al final de cada uno, para crear esa brecha entre un capítulo y otro.
Revisa la estructura de tu libro e identifica el momento exacto donde quieres soltar un descubrimiento.
Y poco a poco, mientras cuentas la historia, ve soltando las pistas que guíen a ese descubrimiento.
Para mí, a la hora de redactar mis propias historias, es algo que me ha funcionado mucho.
Si te han servido estos consejos, por favor compártelos con más personas.
Cuéntame en los comentarios:
¿Cómo mantienes el suspenso en tus historias?