Convertirme en un autor publicado Era uno de mis grandes sueños.
Nunca me imaginé que lo lograría y que creara una vida de la escritura.
Mis padres y hermanos me inculcaron que debía ir a la universidad para conseguir un título, que me permitiera conseguir un buen trabajo.
Estaría en ese trabajo durante mucho tiempo hasta que llegara a los sesenta y tantos y entonces podría jubilarme.
Para mí esto nunca tuvo sentido.
Toda mi vida me he considerado un Checko curioso y extrovertido.
No me gustaba estancarme en nada, y siempre estoy buscando la manera de seguir avanzando.
Pero esa ambición puede volverse un arma de doble filo, si no sabes utilizarla adecuadamente.
Cuando obtuve mi primer empleo, durante el 2011, estaba muy emocionado. Me habían contratado como Auxiliar de Mantenimiento y me daba curiosidad lo que estaba por aprender.
El trabajo era bueno, pero después de un tiempo comencé a sentirme mal conmigo mismo. Me aburría de hacer lo mismo todos los días.
«No debería estar aquí», me decía con frecuencia.
No duré más de seis meses, debo decirlo, porque siempre estaba buscando algo que me retara.
Así que obtuve un empleo en ventas, pero tampoco fue lo que esperaba y solo duré 3 semanas.
Me tomé un tiempo de la vida laboral, para ser exacto 3 meses. Me fui a Ciudad Valles con mis padres para intentar aclarar mis pensamientos y definir lo que quería para mi vida.
No lograba entender porque ningún trabajo me gustaba o porqué me aburría tan rápido.
Encontré otro empleo en el 2012 donde estuve apoyando en un proyecto de certificación para el ISO.
Empecé a usar herramientas de documentación, lo que me pareció demasiado interesante.
Me sentía retado, fuera de mi zona de confort y me alegraba aprender cosas nuevas. Mi tiempo ahí fue maravilloso ya que, gracias a la experiencia adquirida en este puesto, me ofrecieron un trabajo como Analista de Procesos en otra empresa y con el doble de paga.
Aprendí muchas más cosas en este puesto. Entrevistaba a las personas de todos los puestos para conocer los procesos. El trabajo me gustaba y me ayudó a vencer la timidez.
Pero después de un tiempo, comencé a sentirme igual. Algo no encajaba y me sentía muy insatisfecho. Acudí a un seminario donde conocí el libro «Secretos de la Mente Millonaria», que cambió mi vida por completo y me hizo ver la vida desde una perspectiva diferente.
Entró el 2013 y pasaron los meses y me fui a otra empresa, como Líder de Procesos. Recuerdo que me sentía la persona más afortunada del mundo. El sueldo era mucho mayor y con un horario sumamente agradable.
Este empleo me permitió invertir en mi educación como emprendedor y fue ahí donde comenzó la verdadera transición. Sabía que no estaría ahí por mucho tiempo, no era lo que quería para mi vida.
Quería encontrar el trabajo de mi vida, que me hiciera sentir pleno y realizado como persona y profesional. Mientras estuve ahí, fui a muchos cursos de educación financiera, liderazgo, escritura, fotografía e incluso bienes raíces.
Buscaba la mejor manera de generar ingresos extras, aunque sabía que mi verdadera vocación era la escritura.
Conocí a muchas personas increíbles en el camino, que se han quedado y otras que se han ido.
Lo único que no me agradaba era que mi familia no entendía lo que yo hacía. Estaba buscando el camino ideal para convertirme en la persona que realmente quería ser.
Me aburría lo normal, lo tradicional y lo socialmente aceptado de cómo la vida debía vivirse. Siempre buscaba maneras diferentes de hacer las cosas y creo, que hasta cierto punto, les irritaba esa personalidad que yo mostraba.
Pero cuando tienes un sueño y quieres lo mejor para tu vida, debes hacer los cambios necesarios para lograrlo. Entonces decidí invertir tiempo, dinero y esfuerzo en mi educación como escritor. Comencé a aprender de los grandes escritores y fui concretando mis metas.
En el camino perdí muchos amigos y malos hábitos como dejar de fumar o emborracharme todos los fines, pero gané experiencias increíbles e hice amistades inolvidables en el mundo del emprendimiento.
En noviembre de 2015 me despidieron de este trabajo, pero creo que fue lo mejor que me pudo haber pasado.
Tenía un plan, lo estaba siguiendo y el camino cada vez era más claro.
Así que tomé la decisión, a principios de 2016, de no volver a buscar otro empleo más en la escalera corporativa. Esta ha sido la decisión más difícil que he tomado porque no solo renuncié a la vida corporativa, sino a un estilo de vida socialmente aceptado de cómo la vida debe vivirse. Tenía miedo y mucha incertidumbre, pero sabía muy en el fondo que era la decisión correcta.
Me fui a Chicago, donde viví un tiempo y me concentré en crecer mi negocio como autor-emprendedor.
No te voy a mentir, este nuevo camino como escritor y emprendedor ha sido muy duro y lleno de obstáculos, pero lo he disfrutado muchísimo. He aprendido demasiado en el proceso y creo que eso es lo más invaluable.
Hasta ahora he publicado 11 libros, he escrito más de 70 artículos en mi blog, he grabado casi 50 episodios para mi Podcast, he ayudado a decenas de personas a escribir sus libros a través de mis 3 cursos y contenidos gratuitos, y he creado una forma de vida con mi escritura.
De hecho, una de las razones por las que lancé mi Podcast es para compartir mi viaje contigo, mientras sigo construyendo una vida como autor, probando nuevas estrategias y llegando a más personas con mis libros.
Cuando se trata de compartir tu mensaje e impactar al mundo de manera positiva, tienes una responsabilidad moral de lograrlo. El verdadero reto para cada uno de nosotros es poner la intención y la acción, ya que el universo te mostrará el camino que debes seguir mediante situaciones, personas y descubrimientos.
Creo que podría escribirte un completo, pero esta fue mi experiencia de empleado a emprendedor. Si de verdad vas en serio en comenzar una carrera como escritor, este es el mejor momento.
Si te gustó este post y piensas que le puede ayudar a alguien, pásale la voz o compártelo con más personas.
Cuéntame en los comentarios:
¿Qué te motiva a querer escribir un libro?