¿Te cuesta encontrar tiempo para escribir?
Este es uno de los mayores obstáculos de toda persona que desea iniciarse en la escritura
Está muy asociado con la creencia de que se debe escribir un libro muy largo, cuando no siempre es el caso.
Luché contra este obstáculo por mucho tiempo.
Me costaba sentarme a escribir porque hacía demasiadas cosas en el día.
Salía a correr antes de ir al empleo, laboraba 10 horas al día, preparaba la comida del día siguiente, veía mis series favoritas y asistía al gimnasio.
Cuando pensaba en el libro sentía que no tenía tiempo porque la rutina me tenía atrapado. Era como un ratón de laboratorio que corría en una rueda sin descanso.
No podía escribir durante las tardes porque mi mente estaba gastada con la rutina diaria y me costaba mucho levantarme una hora más temprano.
¿Qué podía hacer para escribir efectivamente?
Decidí que lo mejor era eliminar lo que no me producía beneficios a la larga, así que corté el tiempo que dedicaba a las series de televisión. De 5 capítulos diarios que veía decidí ver solo 2.
Fue duro, pero con el tiempo me fui acostumbrando. Ahora que ya tenía un espacio libre, intenté escribir por las tardes, pero terminé fracasando. Mi mente estaba agotada para ponerme con el libro después del ajetreo diario.
Así que decidí probar levantándome una hora más temprano.
No fue fácil llevarlo a cabo la primera vez. Quería seguir dormido, pero tenía que hacerlo de cualquier modo. Me puse manos a la obra y repetí la misma acción, día tras día, luchando contra esas resistencias internas que me detenían.
Sin embargo, se llegó un reto más:
¿Cómo aprovechar realmente el tiempo que había separado para escribir?
Aunque ya tenía una hora completa designada para escribir, ni siquiera escribía la hora completa. Repasaba las ideas durante unos minutos y perdía mi mirada durante otro lapso de tiempo.
A pesar de todos estos obstáculos, terminé el primer borrador del libro en poco más de 60 días.
Aún así, el reto persistía. Tenía que buscar mejores modos de aprovechar el tiempo para escribir con eficacia. Cuando conocí el método Podomoro, que significa realizar tus actividades en bloques de trabajo y bloques de descanso, mi mente voló muy alto y supe que había encontrado la respuesta que necesitaba.
Empecé a probar esta técnica con mi escritura hace un tiempo. Durante 25 minutos escribía sin parar y descansaba otros 5 minutos. A veces me pasaba un poco del bloque de tiempo, pero siempre me tomaba los descansos.
Era como una manera de recompensarme y esto fomentó un comportamiento positivo. Me volví más productivo y eso me tenía muy emocionado. Finalmente adapté este método a mi fórmula CEAR, que significa Configura, Elige, Acciona y Revisa.
Durante 5 minutos revisa tus ideas (configurar) y elige lo que vas a escribir, toma acción escribiendo durante 25 minutos y descansa 5. Vuelve a escribir otros 25 minutos y, al final, revisa lo que escribiste y resúmelo en pocas palabras.
Esto me ayudó a comenzar a documentar a modo resumen todo lo que iba escribiendo, de manera que fue más sencillo memorizar las ideas principales del libro y no dejar cabos sueltos.
Recuerda que lo importante es hacer el tiempo primero, porque si no lo haces, jamás escribirás tu libro.
Debes proteger ese tiempo, lo más que puedas, y administrarlo para escribir efectivamente.
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